XINZO DE LIMIA (Ourense)

EN SUS CAMPAÑAS POR HISPANIA, LOS ROMANOS SE ENFRENTARON A DIVERSOS SECRETOS, INCLUSO AL RIO DEL OLVIDO

El río Limia fue uno de los más famosos de la Antigüedad bajo el nombre de río Lethes. Las fuentes clásicas nos transmiten varias noticias acerca del Lethes. La más significativa es la identificación del actual Limia con el río del olvido (“flumen oblivionis”, en Salustio, Hist. 3,44 y Plinio, 4,115). El río del olvido remite a un río presente en la mitología griega llamado Lete. Era una fuente de agua de la que bebían los muertos para perder sus recuerdos de la vida terrestre.

El acontecimiento central que marca la entrada del Lethes en la Historia, fue la expedición llevada a cabo por Décimo Junio Bruto en el año 137 a.C. Las fuentes mencionan a Bruto como el primero en cruzar el río del olvido, penetrando así, aunque temporalmente, en el remoto norte.

Según nos cuenta Tito Livio (Per. 55), el cónsul llegó hasta el río Limia y ante el temor de sus hombres a atravesarlo, arrebató el estandarte (Signum) al soldado que lo portaba (Signi-fero), cruzó él mismo la corriente y fué llamando a sus hombres por sus nombres para demostrar la falsedad de la creencia.

Los pueblos nativos

A lo largo de su expedición, los romanos luchan contra diversos pueblos. El éxito de su campaña hizo que se concediese a Bruto el apodo de “Galaico” (“Calaico”, Ovidio, Fastos, 5,5,12), ya que este fué uno de los primeros pueblos que se encuentra al cruzar el río Duero. Apiano (Iber. 73-74), alude a la brabura de estos pueblos y de forma especial  a la actitud de sus mujeres. Dice que muchas de ellas luchaban con sus maridos, usaban las armas con la misma destreza que ellos y no emitían ni un solo grito durante las batallas.

Tiempo para la historia

Con el paso del río como elemento central, la “festa do Esquecemento” (fiesta del olvido), recrea una época fundamental de la Historia de Galicia, la romanización, es decir: el encuentro de las culturas latina y castreña. Durante tres días de Agosto, los habitantes de Xinzo de Limia y todos aquellos que participan con nosotros, recuperamos la identidad de nuestros antepasados más remotos para revivir los elementos fundamentales de su cultura, reafirmando así, nuestro reconocimiento a su legado.